¿Hasta Donde Ha Llegado El Madridismo?

¿Hasta dónde ha llegado el Madridismo cuando la única esperanza que nos queda es el rendimiento de jugadores de media talla? El escuchar (o leer) el menosprecio que parte de los aficionados propinan a leyendas vivientes del futbol mundial y que tanto han dado a nuestro equipo, me pone los pelos de punta; especialmente, porque esos mismos aficionados laurean las insignificantes medianías de espejismo de jugadores.

¿Hasta donde ha llegado el Madridismo cuando a nuestras leyendas se le falta al respeto aun cuando, no uno, ni dos, ni tres, sino cuatro entrenadores en los últimos años siguen corroborándolas como indiscutibles en el campo? Habrá quien diga que estas leyendas deciden las alineaciones, como ya se dijo en el pasado de renombrados jugadores. Y también habrá quien se lo crea.

¿Hasta dónde ha llegado el Madridismo cuando se perdona fallo tras fallo, error tras error? Como si un equipo de UEFA se tratase, los aficionados nos damos con un canto en los dientes cuando se gana por la mínima al segundo en la tabla o no somos goleados por el líder. Ya nadie se acuerda que hace seis meses éramos primeros, que llevamos más de una centuria siendo los primeros, y que siempre hemos sido el equipo a batir. De eso, ya nadie se acuerda.

A aquellos que hoy idolatran a Robben les diría que lo miren de cerca, que cuenten cuantas veces sus desbordes por la banda para caer en saco roto. A veces porque la jugada esta cantada, ya que la ha repetido tantas veces que parece jugada ensayada. Otras veces porque, de puro egoísmo, se le olvida que hay otros compañeros en el campo. Y otras veces, las mas, porque simplemente no sabe usar su pierna mala, ni siquiera un poquito para dar un pase.

A aquellos que ven en Higuain al salvador les diría que se fijen bien y cuenten cuantas oportunidades necesita para convertir un tanto, cuantos fallos comete a puerta vacía, y sobre todo, cuantos balones pierde por errores, la mayoría de ellos, no forzados. Pero sobre todo, que se fijen bien en los goles que convierte, en los remates que acierta, en las ocasiones que se queda solo y marca el gol. Que se fijen bien en donde esta Raúl en esas jugadas, y que me cuenten cuantos defensas se ha llevado con él.

A aquellos que opinan que Raúl no subirá la decima a la Cibeles les diría que recuerden, que hagan memoria. Raúl nos dio la séptima, la octava, y la novena; y eso no lo hace nadie, salvo Don Alfredo. Raúl no nos regalara la decima, qué más quisiera yo, pero lo va a intentar. Si hay alguien en este equipo que se va a partir los cuernos por ganar esa copa, ese va a ser Raúl. Ya sea en el campo jugando o desde el banquillo apoyando, Raúl será el que lo intente. Sin comentarios fuera de tono sobre el club o sus compañeros, sin menospreciar al contrario, y sin dejar de respetar a la prensa que le cuestione, Raúl lo intentara.

El Real Madrid representa la excelencia en futbol. Rival temido y respetado. Cabeza de serie y rival a batir. Favorito en todas las apuestas. ¿Hasta dónde ha llegado el Madridismo si ni siquiera nosotros no lo creemos?