lunes, 9 de marzo de 2009

Poco Derbi Y Un Descanso

De todos es sabido que el Madrid debió perder el derbi. Pocos meritos hizo para conseguir el empate, y las pocas ocasiones del encuentro cayeron del lado rojiblanco. Una sensación agridulce que destrona la euforia de semanas pasadas y trae una imagen de realidad justo cuando más se necesita; antes del compromiso ante el Liverpool. Esperemos que los nuestros saquen lo que tienen que sacar, y si caen eliminados, al menos sea con la cabeza bien alta.

Y para aquellos que habitualmente siguen este blog, decirles que no se si podre ver el partido; no depende de mí. Tratare de verlo y escribir una crónica, pero si no puedo, que me perdonen. De la misma forma que les pido me perdonen si no me ven más activo en las próximas semanas. Me espera un viaje largo a la Polinesia que me llevara a conocer a una pequeña persona que en estos momentos sigue en el vientre de su madre y puede que me impida comentar sobre lo nuestro por unos días. Tal vez la próxima vez me tengan que llamar abuelo. Hala Madrid!

domingo, 1 de marzo de 2009

Despacito Y Con Buena Letra

Desafortunadamente, la transmisión del partido se corto a cinco minutos del final de la primera parte. Las razones las desconozco, pero aquellos que seguimos los partidos de nuestro equipo a través de la cadena estadounidense Gol TV nos perdimos, seguramente, lo mejor. Tras una primera parte soporífera protagonizada por el desorden, los errores, y las hartadas de balón a las que ya nos tiene acostumbrados Robben, cual no fue mi sorpresa al ver el resultado, horas después, en la web de Marca.

Nos acostábamos a cuatro puntos del líder y sin querer hablar de ello porque cuando se habla mucho pasa lo que pasa, y nos levantábamos vistiendo la camiseta rojiblanca a la espera de que nuestros vecinos del Manzanares cumplieran con su misión. Henry y Messi salieron dispuestos a aguarnos la fiesta. Pero para aguar de verdad están Forlan y, por supuesto, Agüero. El Atlético, por dos veces y contra todo pronóstico, remonto al líder y lo dejo tumbado sobre el césped del Calderón.

Ocho puntos en tres jornadas se ha dejado el “Dream Team”, a quien los fantasmas del pasado empiezan a perseguir. No es momento de confianzas, si no de trabajo. No es momento de celebraciones, si no de concentración. Quedaba mucha Liga hace tres semanas, y todavía quedan muchos minutos que jugar. Minutos que serán de infarto. Hay que mantener la calma y seguir mejorando partido tras partido. Como se suele decir, “despacito y con buena letra.”